Moratalla es uno de los pueblos más encantadores de la Región de Murcia. Sus casas se escalonan por callejuelas empinadas entre la Iglesia de la Asunción, la ermita de Santa Ana y el convento de San Francisco sobre las faldas del cerro de San Jorge, coronando el pueblo la Torre del Homenaje.
Viajando a Moratalla nos internamos en un paisaje inesperado donde se combinan a la perfección el paisaje de huerta y las llanuras de cereales, con los picos más altos de la Región, como el de Revolcadores, la mole del Buitre y el doble pico del Fraile.
Constituye un filón para los amantes del arte rupestre, contando con muestras del Arte Levantino y esquemático, siendo declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO. Para ilustrar y dar a conocer los diferentes yacimientos y abrigos recientemente se ha inaugurado en Moratalla el Centro Regional de Interpretación de Arte Rupestre "Casa de Cristo", llamado así por una supuesta aparición de Jesucristo en el monte de Benamor.
En su término municipal nace el río Alhárabe y su afluente, el Benamor, pudiendo encontrar en su recorrido pozas naturales, donde disfrutar del baño en los meses estivales, y el puente de Hellín, resto monumental de la presencia romana.
La flora del municipio es también de gran interés. En las zonas más bajas aparece el pino carrasco y a medida que aumenta la altitud nos encontramos con el pino rodeno mientras que en las cumbres más altas lo hace el pino laricio. Las encinas también abundan y en ocasiones forman bosques mixtos junto a los pinos, que resultan especialmente bellos. Uno de los paisajes más bonitos de Moratalla lo forman los bosques de galería, formados por chopos y sauces, que crecen en los cauces de los cursos de agua y que llenan de tonos amarillos y naranjas los otoños de Moratalla. También son abundantes las plantas aromáticas -manzanilla, lavanda, tomillo, romero...- y los sabinares.
En cuanto a la fauna, es de especial interés la presencia de buitres leonados y cabras montesas.
